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Este proyecto quiere minimizar el número de desplazamientos en automóvil con un solo ocupante, creando una herramienta que facilite la compartición de vehículos privados para realizar trayectos en común, con poco tiempo de anticipación.
Este modelo es conocido como dynamic ridesharing o compartición dinámica de trayectos y permite reducir los crecientes costes, para el usuario, derivados de la utilización diaria del coche, la congestión en las carreteras, el consumo de combustible y por tanto las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera.
Para conseguir el objetivo se ha desarrollado un prototipo de sistema que realiza una gestión de la información eficiente para permitir poner en contacto, en poco tiempo, conductores y viajeros que tienen trayectos comunes. Se ha evaluado la capacidad del sistema y la aceptación por parte de los usuarios y administraciones realizando una prueba piloto entre dos municipios del Área Metropolitana de Barcelona.
Se utilizarán tecnologías de comunicaciones inalámbricas para poner en contacto a los usuarios (SMS, GPRS, 3G) y de localización (GPS) instalados en los coches.